Definiciones rápidas de términos asociados:
Retención: es donde pasamos el tiempo hagamos lo que hagamos con nuestras vidas.
Automóvil: vehículo monoplaza con la capacidad, en caso de emergencia extrema, de transportar más pasajeros.
Autobús: vehículo de gran capacidad rápido y puntual. Sufre de fobia a los automóviles, reduciendo considerable su eficiencia.
Plaza: elemento muy inestable y con vida propia que es capaz de provocar un vacio entre la masa de vehículos. Su avistamiento causa graves alteraciones nerviosas y puede ser la causa de disputas a muerte.
OTA: Plaza artificial diseñada para robar a los ricos y beneficiar a los muy ricos.
Parking subterráneo: Conjunto de plazas artificiales diseñado para robar a los muy ricos y beneficiar a los extremadamente ricos.
El tráfico es el conjunción de los términos anteriormente expuestos que demuestra la ineptitud de nuestra sociedad a la hora de resolver la movilidad de su población, en especial por carretera. Es un problema global que nos afecta a todos, incluidos los peatones.
Hoy que la tecnología nos permite el teletrabajo desde el espacio exterior, seguimos hacinandonos en las vías rápidas para cumplir horarios decimonónicos.
Hoy que la energía es nuestro bien más preciado, la derrochamos a diario en trayectos repetitivos que miles de personas comparten, pero realizan de modo individual.
Hoy que podríamos planificar con total libertad nuestro tiempo libre, nos empeñamos en seguir festejando juntos antiguas festividades y no solo eso, además jugamos a crear megapuentes y aqueductos para que la acumulación de desplazamientos sea lo más insoportable posible.
¿Es posible detener esta espiral que nos aboca a la locura?
Pues no lo se, pero no soy optimista. Nadie creo que lo sea sobre un tema que sufrimos a diario, que intensificamos el sufrimiento en vacaciones y que nos arrebata vidas como si de un incesante goteo se tratará.
No quiero que la información sobre el tráfico se limite a una gélida cifra de muertos en un periodo festivo. Quiero verdadera información, que se investigue quien esta tratando de solucionar que puntos y de que manera, aunque lo utilicen como mera campaña política, pero que se vea cierto movimiento.
No quiero que las acciones se limiten a sanciones ante imprudencias. Quiero que exista una educación global, un respeto al conjunto de la sociedad y gracias a ello una concienciación de que desplazarme en un vehículo motorizado es una responsabilidad y que un error por nimio que sea tiene consecuencia catastróficas.
No quiero que la inercia nos impida buscar la salida. Es hora de plantear soluciones globales, realmente globales. Si hay que legislar que servicios entran a una hora y que otros servicios pueden entrar a otra hora, pues habrá que hacerlo, porque esta visto que de mutu propio esta sociedad no evoluciona, repite incesantemente los errores del día anterior.
Y nosotros como un rebaño obediente le seguimos la corriente aunque eso nos cueste dejarnos la vida a plazos en la carretera y suerte que tenemos de no perderla en un pago único. Así es la carretera, posiblemente el lugar más peligroso de nuestro hábitat y no pasa un día en que no la crucemos... ¿realmente no existe otra alternativa?.
